El caso trataba de un conflicto pequeño, sobre limites de propiedad en este prepario, donde no existen planos y si muchisimas necesidades. De cada lado tenía una persona, apadrinada por su numerosa familia, donde se prometían "machete", para derimir ese conflicto.
Un abordaje rutinario habría sido tomar nombres y dar una advertensia, luego pasar datos por el radio a la oficina para que se anotara en una bitacora, para luego continuar con el patrullaje, sin embargo, por lo menos en mi mente había una preocupación: ¿Qué pasaría cuando me retirara de ahí?
Si bien, eché mano de un poco de creatividad y de mi tiempo libre para regresar unas horas más tarde con un escrito que redacté, lo cierto es que un evento así me hace recordar lo que es el servicio al cliente y el desarrollo de habilidades para este importante ambito en la vida de las personas.
Y es que todos ofrecemos el servicio a clientes, sean internos como externos: familia, la pareja, compañeros de trabajo o estudio, algunas personas trabajaran propia mente en ventas, pero al final todos y todas nos involucramos, aún sin querer, en este proceso.
Cuando una persona recurre a nosotros o nosotras, no lo hace porque no tiene nada mejor que hacer, sino porque visualiza que tenemos un bien o un servicio que puede subsanar una deficiencia o necesidad que tiene y que no le permite tener un estado de bienestar general, ante el estimulo que le impulsó a la busqueda de "eso" que le falta.
Por lo tanto, en primera instancia debemos comprender que la persona frente a nosotros, requiriendo información o bien un bien, lo hace porque tiene un malestar, que lo motiva a esa busqueda.
En segunda instancia, debemos aceptar que revestimos de alguna importancia para esa persona, dado que recurre a nuestra persona o negocio para buscar estar bien y no a otra institución.
Con esa información, deberiamos aceptar la importancia en esa relación consciente o inconsciente que surge, pero que nos pone en un lugar determinado. Luego es cuestión de actuar con determinación, a fin de desarrollar un criterio que permita ir más allá de una simple escucha, para tomar un papel proactivo y ofrecer más que eso: colaborar con la persona que tenemos ahí, para que halle solución a su problema o problemas.
Dar ese paso de la simple escucha y recibo de un pedido, a un papel proactivo, donde entiendo la importancia de esa solicitud que hace nuestro cliente o clienta, involucrandonos por dar una solución, es lo que marca la diferencia que nos lleva a calar en la vida de las personas y crea la lealtad que nos da liderazgo en el medio que nos desenvolvemos.
¿Por qué no buscar un poco más de información al respecto? Espero que podamos dialogar a futuro e intercambiar información que nos empodere y lleve a la excelencia en la solución de problemas, de las personas que confian en nosotros y nosotras, solicitando nuestros servicios o productos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario